No cabe duda de que el cambio climático nos presenta un gran desafío que, como sociedad, debemos enfrentar con suma urgencia. En el caso de las organizaciones, apoyadas en el desarrollo tecnológico que ha crecido enormemente en las últimas décadas, tenemos que realizar nuestros mayores esfuerzos para llegar a ser un ejemplo de sustentabilidad y ser un aporte tanto para el medioambiente como para las comunidades que nos rodean.
Acá destacan la utilización eficiente de energías limpias que nos permitan un mejor uso y preservación de los recursos naturales entre los que sobresalen el hidrógeno verde, el empleo del agua desalada o las energías renovables no convencionales, tales como la solar y la eólica. A ello, se agrega el ejecutar mejores prácticas y procesos más productivos y limpios.
Del mismo modo, se tiene que ayudar a reforzar en todos los niveles educativos para concientizar y sensibilizar acerca de la importancia de cuidar nuestro medio ambiente y ejecutar en conjunto, las acciones de protección y preservación, no solo como un recuerdo de la carta de Belgrado elaborada en 1975, sino como una práctica diaria, en la que tal como sostiene la misiva, ser capaces de buscar soluciones para los problemas existentes y controlar los impactos del cambio climático.
Mauricio Andonie, Gerente de Ventas de la vertical de Minería y Recursos Naturales en Adexus